Es una realidad que hay diversas formas de lograr ahorrar el agua en el hogar, pero no nos damos cuenta o no queremos hacerlo. En su gran mayoría, se relacionan con hábitos y costumbres propias del ser humano. Por ejemplo, no dejar correr el agua en el grifo mientras se lavan los dientes, cerrar el grifo mientras se lava los platos, ducharse lo necesario, regar el jardín a primera hora, entre otros.
Otros consejos se relacionan más a la instalación de diferentes aparatos y dispositivos que permiten en gran parte potenciar ese uso indiscriminado del agua. Por consiguiente, se pueden nombrar algunos de tantos tipos de consejos para llevar a cabo:
Cisternas de bajo consumo: en la actualidad, se han dado a conocer innovadores modelos de cisternas para reducir el consumo de agua de manera significativa. Mediante pequeñas descargas de agua, aproximadamente unos siete litros, se demuestra que es suficiente y necesario, aparte de fomentar el bajo consumo.
Resulta ser una gran diferencia a aquellas que derrochaban unos 30 litros, estadística bastante significativa. Si te es imposible realizar una correcta sustitución, puedes ir a un profesional para que la adapte perfectamente. Lo cual, es más que aconsejable.
Si no es suficiente, puedes hacerlo tú mismo tras el flotador, para que se limite el caudal de agua y eleve la presión. Así, se evitarán grandes pérdidas y mayor confort. Lo que es muy beneficioso para que no se generen conflictos a futuro.
También se puede añadir demás accesorios, como el perlizador. Este causa un similar efecto, con tan solo la diferencia de que el consumo que se haga de agua se reducirá hasta un 50% aproximadamente.
Grifos monomando: estos son particulares, ya que su estructura evita rotundamente toda posibilidad de goteo al momento de cerrarse. A su vez, permite el control de la temperatura con la cual es impulsada.
Así, es fácil prevenir pérdidas. De lo contrario, se debe esperar a tomar la temperatura ideal mientras se deja correr el agua.
Lavadoras de bajo consumo: si tienes en mente renovar tu lavadora, lo ideal sería que te intereses por aquellas que contienen programas de muy bajo consumo. De seguro, lo que te impida ello es la economía, sin embargo a largo plazo es muy beneficioso debido al ahorro de dinero, agua y energía eléctrica.
Sistema de recirculación de agua: en el mercado se está volviendo un éxito este sistema. No tan solo por lo novedoso y moderno que resulta, sino más bien porque consiste en circuito cerrado de circulación en el que se alcanzan los 35°C. A partir de allí, sale el agua por el grifo.
De dicha manera, se evitan por completo derroches innecesarios hasta llegada la temperatura y, mediante un sistema de retorno, se mantiene el agua de la caldera templada, algo como el reciclado. A su vez, se ahorra en gas y electricidad. Sorprendente.